La Lepra tuvo un partido apático, en el que desperdició las pocas que tuvo y se salvó de la derrota por la buena actuación de Hoyos. Fue 0-0 en el Coloso.
Tras las dos derrotas consecutivas por liga, el equipo de Heinze salía al terreno del Coloso para volver a sumar en el campeonato y no quedar tan relegado. Un Coloso repleto lo recibió ilusionado con una nueva alegría. El rival de turno: un Argentinos Juniors alternativo.
La primera parte fue sumamente aburrida. Predominaron los pases mal dados, las imprecisiones y las indefiniciones en tres cuartos de campo. Así y todo, fue la Lepra el que pudo generar algunas jugadas de riesgo. La más clara, Recalde, en el área chica, la abrió demasiado y desperdició la ocasión. Sobraron los rendimientos bajos. Apenas se pudo rescatar a Gómez y Méndez con algunos chispazos, que solo quedaron en eso. Sin goles al descanso.
La segunda parte fue similar. Las jugadas de peligro que hubo, fueron claras. En este caso, la visita tuvo las más riesgosas. Sin embargo, la figura de Hoyos salvó al conjunto rojinegro en tres ocasiones clarísimas y evitó la derrota. Sin dudas, el arquero fue el mejor de Newell’s. Los zagueros estuvieron muy firmes. De mitad de cancha hacia adelante, pocas cuestiones positivas por destacar.
La ausencia de gol es alarmante. En los últimos seis encuentros convirtió tan solo una vez y consiguió cinco puntos de dieciocho.
El empate fue justo pero con sabor a poco para Newell’s que está necesitado de una victoria en la liga y sigue cediendo terreno en la carrera por la clasificación a las competencias internacionales. Ahora, se viene un partido más que decisivo. El martes en el Coloso frente a Santos.
